¿En Cartagena que buscamos?
Por: Felipe García Cárcamo
El artículo 38 de nuestra Constitución Política establece como un derecho fundamental la libre asociación para el desarrollo de distintas actividades. Es un derecho que le garantiza a la ciudadanía la libertad pública de organizar herramientas formativas que conlleven a la democratización del acceso que puede tener nuestra gente a la gestión de los funcionarios públicos.
En Cartagena fue presentado el último informe de Cartagena Como Vamos, dónde nosotros tuvimos la oportunidad de asistir y observar de manera objetiva los resultados en los distintos aspectos que afectan nuestra ciudad. Según estos indicadores de 2023 a Cartagena no le fue bien y temas como la inseguridad, el desempleo y la pobreza extrema marcaron en rojo.
Johann Gottlieb Fichte fue un filósofo idealista de gran connotación mundial que contribuyó al derecho su fundamentación sobre el derecho natural en el cual quiero precisar que las libertades y acciones morales podrían elevar la consciencia al ámbito de su proceder cogido de la mano de una reflexión trascendentes. Es decir que un informe que presente un gremio será importante para un sector de la ciudadanía que representa unos intereses, pero que naturalmente no puede convertirse en autoridad cuando el derecho de asociarnos es de todos.
Si Cartagena va bien o va mal, se debe ver reflejado en la calidad de vida de la gente, porque una encuesta puede arrojar un resultado diferente a la realidad o al sentir de la comunidad y no pude ser el termómetro de un gobierno los fundamentos de un gremio que al igual que cualquier sector de la ciudad amparados en bases jurídicas pueden hacer lo mismo.
Para el sector gremial de la ciudad podríamos ir mal, pero para otros sectores la imagen y el sentir de un buen gobierno puede ser diferente, entonces está herramienta libre de opinión no podría ser utilizada como un mecanismo de coacción administrativa cuando esté ejercicio hace parte de los derechos y libertades públicas que a diario defendemos.
Con el Plan de Desarrollo “Cartagena, Ciudad de Derechos” se busca la justicia, sin duda alguna el individuo es el instrumento de la ley, empero la ley es conciencia jurídica individualizada y realizable. Dado esto fluye la ley como expresión de la voluntad general que es el objeto de otros controles realizables. Es decir que se debe cambiar en la ciudad el interés de saber cómo vamos por el de que BUSCAMOS, para que las reivindicaciones de nuestra gente se puedan palpar, para que nuestros habitantes tengan claro cuál será la ruta del avance, para que la idea de garantizar derechos este expuesta e inmersa en todo orden jurídico y de esta manera podamos adquirir criterio propio que emane de la sana crítica, del respeto por las instituciones y del valor intangible de nuestra ciudad no solo en lo administrativo sino en otras garantías legales.
¿En Cartagena que buscamos?
La idea del fin del derecho tiene relación con la teoría de los fines que desarrollo Aristóteles en el sentido que todo tiene un fin y que el fin supremo de todas las cosas es la FELICIDAD. Y por ende se debe buscar la seguridad jurídica para que la voluntad política de quien gobierna logre su objetivo. Pues bien; consideramos que la ciudad debe ir encaminada a la prosperidad que es otro fin de la seguridad jurídica. En este orden de ideas el fin de la información es buscar el desarrollo social sin velar por la seguridad de intereses particulares.
Cómo cartagenero no conozco resultados de alguna encuesta encaminada a informarnos el impacto social generado por las empresas de Cartagena en la comunidad. Deberían hacer esa medición. Aquí es donde cobra valor el sentido de lucha de algunos líderes de opinión en nuestra ciudad como el Dr. Jorge Pérez Villa, Jacqueline Perea, Carlos Figueroa, Bernardo Romeo Parra entre otros, que han defendido el equilibrio jurídico en las acciones ciudadanas.
En síntesis, podemos decir que debemos cambiar el método y que nuestra clase empresarial pueda ser evaluada por la gente del común, así como ellos crearon su herramienta para medir los gobiernos, si logramos está unidad entre, gobierno, ciudadanía y gremios seguramente dejara de interesarnos saber cómo vamos y crearemos sinergia en lo que secularmente hemos buscado que es la disminución de las brechas sociales.